¿Nueva ley de educación? ¡Mis polainas!

Yo siempre he sido partidario de que en este país lo que falta es educación, y a gritos. Ahora se ha propuesto una reforma de la educación, ¡pero hasta las huevas! Y bueno, vivimos en el Perú.

Sucede que Martha Hildebrandt ha decidido que los alumnos de universidades públicas que salieron de colegios privados deben pagar, al igual que los que pueden. Y por su lado, Luisa María Cuculiza agregó que se debería eliminar también el medio pasaje para los alumnos de universidades particulares, como si no bastara que éste me cuesta lo mismo que pagar completo (es más, nunca fue medio, porque si se cobra 1.20 de pasaje adulto el medio debiera ser 0.60); déjenme entender, por favor, o sea que si yo pago escala 1 en la PUCP y tengo rascando pa mi medio pasaje, ¿estoy cagado?

¿Qué hay de las familias venidas a menos? Digo, si estudié en el Franco Peruano (un colegio ESTATAL francés con sede en Lima, para que vean la calidad de la educación estatal gratuita en otros países), pero me quedé sin plata y decidí estudiar en la Universidad Agraria, ahora tengo que pagar mensualidad para mantener funcionando una institución que EL ESTADO DEBERÍA MANTENER, ¿o me equivoco? O por último, de repente me dio la gana de estudiar en una universidad pública precisamente ¡porque es gratuita, o lo suficientemente barata para pagármela yo mismo!

Y lo que pasa es que el problema de fondo no es que a las universidades públicas les falta plata porque los alumnos no pagan, sino porque son instituciones estatales que no tienen un lugar importante en el presupuesto. ¡Carajo! Y para colmo quienes están en el poder y deciden este tipo de cosas reciben sueldos enormes que se gastan en carros del año, en meter a sus hijos en los mejores colegios (y los más caros) - y estoy seguro que ni siquiera saben cómo es una universidad estatal - además que chupan whisky etiqueta azul en cantidades industriales (y se meten coca por todos los poros). ¡Es como si mis viejos se fueran a comer a Astrid & Gastón todos los fines de semana, se compraran ropa nueva en Ripley una o dos veces por semana y hubiera dos carros del año full equipo en nuestra casa de Chacarilla, pero a la hora que les pidiera plata para libros y cuadernos, o simplemente les pidiera ciertas consideraciones básicas por SER SU HIJO, me dijeran que no tienen plata, que me las ingenie yo, que tienen muchas deudas y que no joda! Ahora a pensar, ¿es justo que un Estado se comprometa a asegurar educación pero que no destine el presupuesto necesario?

Y sin embargo no todos están de acuerdo, tal como se muestra en los siguientes artículos, hay gente que tiene otras opiniones que valen la pena conocer:

Caridad Montes: Estoy a favor de la gratuidad en la enseñanza pública

Luis Izquierdo Vásquez*: 'Estado debe invertir más'

Del blog Georgeusparla:
Educación gratuita??!